El irlandés Bram Stoker ha pasado a la historia como uno de los referentes de la novela gótica de fantasía con su obra Drácula, publicada en 1897.
Aunque algunos creen que es la primera novela donde aparece la figura del vampiro, no es así, ya que existen referencias anteriores. Sin embargo, Bram Stoker reunió las cualidades de la criatura y las perfiló, quedando la imagen del vampiro muy parecida a la que impera en la actualidad. Hablando de la actualidad, el vampiro se ha convertido en una figura importante dentro de la cultura mundial. El arte le ha dedicado una especial atención, y existen dentro de la literatura, la pintura, el cine… hay pocos lugares del mundo donde el mito del vampiro no esté arraigado.
Volviendo al tema principal, Drácula es una novela epistolar, es decir, escrita en forma de cartas, anotaciones en diario, transcripciones de conversaciones, etc. Hay varios personajes principales que son los encargados de mostrar la historia a través de sus vivencias.
La trama sigue una evolución continua, en la que conforme avanza el tiempo, los personajes acaban cruzando sus historias, llegando a un final en el que cualquiera de ellos podría relatarlo, pues sus historias acaban fundiéndose en una sola.
El tema de la novela es a gusto del lector. Hay tantas interpretaciones posibles que no se me ocurre ninguna que brille más que las otras. Mi recomendación es sólo dejarse llevar por las páginas, contemplando los decorados, los personajes y la historia. No desvelo nada desconocido al decir que el ambiente es tétrico y oscuro, pues es en la noche cuando el vampiro dispone de plenos poderes. En cuanto a esto último, voy a dar sólo un detalle que no desvela nada importante de la historia, pero que me llamó la atención: Drácula puede moverse de día, tal como aparece en cierta escena, aunque de día no parece poder usar sus poderes. Este hecho me chocó al leerlo, pues difiere de la imagen actual de los vampiros, donde al darles la luz del Sol son reducidos a cenizas en la mayoría de los casos. Y este punto lleva a otro que es la base para mi recomendación de su lectura: la novela es mucho más rica en detalles que cualquier película que se haya hecho sobre la misma. De hecho, la versión de Coppola creo que es la que más se adapta, pero después de leer la novela, la película me parece cutre, y, sobre todo, se ha cargado una parte muy importante de la personalidad del vampiro, y no digo más.
Los personajes son fácilmente distinguibles, muy humanos y con los pies en la tierra. Muy bien descritos, es fácil hacerse una idea de su fisonomía y sus motivaciones, y también es fácil sufrir con ellos las penurias que padecen durante la historia.
En cuanto al que da nombre a la novela, Drácula, el autor se inspiró en un personaje histórico real, Vlad Tepes, un príncipe de Valaquia cuya historia nos da a conocer el mismo vampiro. También los lugares descritos son lugares reales.
Mención especial para el ambiente. El comienzo por tierras de Europa del Este me parece soberbio, pero tampoco queda atrás la descripción de Londres y los demás lugares de Europa de esa época, así como la forma de vida de la gente de entonces.
No exagero al decir que Drácula es una de las novelas que más me han gustado a lo largo de mi experiencia como lector. Tiene una buena historia, buenos personajes, intriga, acción, romance (aunque no como los jóvenes de ahora se lo imaginan, gracias a la serie de Crepúsculo).
Imprescindible leerla, no es suficiente con haber oído algo sobre de qué va o con haber visto una deformación de la historia en una película.
"la versión de Coppola creo que es la que más se adapta, pero después de leer la novela, la película me parece cutre, y, sobre todo, se ha cargado una parte muy importante de la personalidad del vampiro" totalmente de acuerdo contigo, a mi parecer libro muy recomendable.
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