jueves, 9 de mayo de 2013

Pasajero para Frankfurt, de Agatha Christie

                Pasajero para Frankfurt, de la escritora de misterio inglesa Agatha Christie, fue publicado en 1970, el año en que la escritora cumplía ochenta años.
                Es una novela rara, comparada con el resto de la obra de le escritora, ya que deja de lado el tema policiaco o de misterio. Es una novela de espionaje.
                El comienzo tiene lugar en el aeropuerto de Frankfurt, donde un diplomático inglés se ve abordado por una joven que le pide ayuda para salir de allí de incógnito, ya que su vida corre peligro. El diplomático la ayuda a salir, y a partir de ahí comenzará la investigación de un nuevo movimiento de orden mundial que pretende destruir las bases de la sociedad.
                Aunque el diplomático y la extraña son los principales protagonistas, hay otros personajes en los que se focaliza la narración (diplomáticos, políticos, militares y científicos), y la trama va saltando de unos a otros conforme va avanzando la historia.
                En cuanto a la construcción de los personajes, me ha parecido bastante pobre. Escasa personalidad, que hace difícil sentirse identificado con ellos. Además, en muchos casos, de los personajes se sabe poco más que el nombre, el cargo que ocupan y una escueta descripción física. Queda así una imagen como de un “ente” que habla y proporciona información de la trama y poco más. Incluso los protagonistas están poco desarrollados.
                En cuanto a la trama, va avanzando sin prisa, pero sin pausa. Aún así, no me he sentido enganchado a la misma. No lograba despertar mi curiosidad, y eso es grave en la novela de esta autora capaz de mantener siempre esa atmósfera de misterio que tan bien queda reflejada en otras de sus obras.
                El tema tratado, la revolución social, el destruir el status quo para formar una nueva sociedad, queda pobre de argumentos. No se explica claramente qué se pretende, tampoco se explica el por qué de ese movimiento, y al final de la obra queda ese regusto a “¿Ya está? ¿eso es todo?”. Aunque tiene algunos planteamientos interesantes, en el conjunto de la obra se ven diluidos por la poca fuerza de los argumentos, y por la recaída de las decisiones en unos personajes sin carisma, con una importancia que ellos mismos se atribuyen y que a mí, personalmente, no me ha llegado a convencer.
                Pese a todo, no es una lectura pesada. Está llena de altibajos, y hay algunos pasajes que logran captar la atención, haciendo interesante la historia, pero después aparecen otros momentos mediocres, haciendo que el porvenir de los personajes o la propia historia carezcan de interés para el lector –al menos, esa ha sido mi experiencia-.
                Creo que no es la mejor historia de Agatha Christie, y aunque no soy un entendido de esta autora, diré que para mí, ha sido la peor de ella que he leído, lo cual no quiere decir que sea mala, porque si fuera muy mala, no habría llegado ni a terminarla. ¡Acuérdate, Ulises de James Joyce, que los críticos te habrán puesto por las nubes, pero yo al llegar a la página setenta tuve que parar porque estaba en juego mi salud mental!

viernes, 3 de mayo de 2013

Dune, de Frank Herbert

                Dune, de Frank Herbert, es la primera novela de la saga más conocida de ese autor norteamericano. Fue publicada en 1965. Tiene 704 páginas, y ha ganado numerosos premios de su categoría, ciencia-ficción. Premios como el Hugo o Nébula, entre otros.
                En un futuro lejano, la civilización consta de varias casas poderosas, sometidas al liderazgo de un emperador. La novela se centra en la casa de los Atreides, protagonistas de esta obra. Principalmente, se centra en el heredero de la Casa Atreides, Paul, hijo del conde Leto y la dama Jessica.
                La historia comienza con las preparaciones para el traslado de la residencia de la Casa Atreides, al planeta Arrakis, un planeta desértico, fuente del bien más preciado de la galaxia: la especia llamada “melange”, una droga cuya función principal es el alargamiento de la vida y otras extrañas cualidades. Sin embargo, su consumo provoca dependencia, de ahí su valor.
El traslado de la Casa Atreides se debe a una concesión del emperador para explotar ese recurso natural, que anteriormente era explotado por una casa rival, los Harkonen.
La narración es en tercera persona, y se va centrando en varios personajes. Aunque cada capítulo sigue a un personaje concreto, a lo largo del capítulo hay veces que el foco de atención cambia de un personaje a otro, entrando dentro de sus actos y motivaciones.
Hay muchos elementos que hacen de esta obra una historia muy interesante: los gigantescos gusanos que pueblan Arrakis, haciendo arriesgada la recolección de especia, el pueblo nativo de Arrakis, conocido como “Fremen”, la rivalidad entre las casas Atreides y Harkonen, etc.
Con esos elementos se construye la historia, de la cual no quiero dar más detalles. Comentaré sin embargo el tema, ya que es muy interesante: la ecología. El planeta donde transcurre la mayor parte de la historia, Arrakis, es, como dije, un desierto, un planeta hostil para la vida. Hay numerosas reflexiones respecto a la forma de vida de los indígenas, y los planes para convertir Arrakis en un planeta próspero, pese a la escasez de agua, que es el bien más valorado por los indígenas, más aún que la especia que ahí se produce.
La exposición que el autor hace sobre la ecología comparte protagonismo con otras reflexiones sobre política, religión o eugenesia. En la historia, usando esos ingredientes, se crea un ambiente de tensión, donde el lector siente en todo momento una hostilidad permanente: traiciones, espionaje y contraespionaje, venenos, códigos de honor, engaños. Todo ello da una sensación de peligro que mantiene al lector en vilo, sin saber qué sucederá a continuación. Y ello a pesar de las introducciones de cada capítulo, donde aparece un fragmento que generalmente hace referencia al futuro. Pero aun sabiendo qué pasó después, se mantiene la tensión del presente.
La historia no acaba con Dune, ya que el autor en un principio tenía pensada una trilogía. Después siguió ampliando la saga, y tras su muerte, su hijo siguió publicando más partes de la saga, a partir de las notas que había dejado su padre.
Hay una adaptación cinematográfica (que no he visto) sobre esta primera parte de la saga, y también una serie que abarca la trilogía inicial. Pero yo siempre he preferido la lectura…