viernes, 16 de septiembre de 2016

Guerra mundial Z, de Max Brooks

                En 2006 se publicó la novela Guerra mundial Z, del estadounidense Max Brooks. Con 464 páginas, es la continuación o complemento de Zombi – guía de supervivencia, la cual no he leído.
                La historia trata sobre la investigación llevada a cabo por un observador de la ONU, el cual ha realizado una recopilación de testimonios de algunos de los supervivientes de una guerra de escala mundial contra los zombis.
                La novela está estructurada en forma de entrevistas, en la que cada capítulo es el testimonio de un personaje concreto, de un lugar del mundo concreto, que cuenta en primera persona su experiencia. Dichos testimonios están organizados de forma cronológica, así que la trama va avanzando desde que comienza la infección hasta que se extiende, pasando por cómo afecta al mundo, qué hace la humanidad contra esa plaga, y cómo se erradica.
                La elección de esta forma de narración, si bien resta misterio a la historia al saber que los narradores han sobrevivido, por otra parte cuenta con el punto fuerte de mostrar ese apocalipsis desde múltiples y muy distintos puntos de vista.
                El ambiente está muy logrado. Partiendo de una visión global de la política, religión, valores humanos, etc., se muestra cómo cambia todo, cómo evoluciona (o involuciona). Hay abundantes descripciones técnicas de armamento, técnicas de supervivencia, problemas que podrían aparecer en caso de una hipotética apocalipsis de ese estilo, etc. A veces cae en determinados clichés para diferenciar las partes del mundo o los personajes, y hay un excesivo protagonismo estadounidense, pero salvo por esos pequeños detalles, el lector tendrá una buena visión de cómo cambia el mundo y la transición desde el punto “A” en que comienza la historia hasta el punto “B” en que acaba.
                Los personajes, como he dicho, son muy dispares. Quizás por la forma elegida de narración, o quizás porque el protagonista principal y nexo común de la historia sean los zombis, en general son personajes muy homogéneos. Se les ha intentado dar profundidad, pero la longitud de los capítulos hace que al lector le cueste empatizar lo suficiente, ya que el capítulo se acaba y se cambia de personaje. ¡Ojo! Las historias, sin embargo, son muy heterogéneas, y ahí es donde está la brillantez de esta novela. Cambios de escenario, cambio de circunstancias (geográficas, climatológicas, sociales…), pero mismo enemigo y mismos problemas, aunque adaptados a la situación. Aunque hay una predominancia de las historias militares, esto no afecta a la novela, porque es lógica tal predominancia dado el tema que se trata.        
                El ritmo es adecuado. La historia avanza saltando de localización geográfica y personaje, pero mostrando claramente una evolución lenta hacia un desenlace. En cuanto al susodicho desenlace, me ha parecido algo precipitado y poco documentado, pero el conjunto hace que no quite demasiado brillo a la historia.
                Es la primera novela de temática zombi que he leído, y sinceramente, me ha gustado. Me ha cautivado el formato de historias cortas, lo que ha hecho muy amena la lectura, y me ha transportado a distintos lugares basados en lugares reales de la actualidad, y me ha mostrado un “¿Qué pasaría si…?” que me ha mantenido enganchado de principio a fin.  

Aunque sigo siendo escéptico sobre la calidad de muchos bestsellers, en este caso no me he sentido defraudado. Y en cuanto a la película del mismo nombre, recuerdo que, salvo el argumento de la historia, no tenía demasiado que ver con la novela, por lo que, como siempre, y al margen de que una u otra sea mejor o peor (son distintas formas de arte), recomiendo la lectura.            

No hay comentarios:

Publicar un comentario