miércoles, 26 de septiembre de 2012

El extranjero, de Albert Camus

                El extranjero está catalogado como una de las mejores obras del escritor francés Albert Camus. Nacido en Argelia, donde vivió durante varios años, es ahí donde tiene lugar la historia narrada en esta novela, en Argel, la capital del país.
                A lo largo de sus 160 páginas, el narrador nos cuenta en primera persona su vida, una vida a simple vista totalmente normal. La historia comienza con su visita al asilo donde acaba de morir su madre, hecho que tendrá mucha relevancia en otra parte de la novela.
                La historia trata de la vida en su vecindario. Parece un argumento simple y aburrido, pero nada más lejos de la realidad. La exposición de esta vida normal y poco estimulante está escrita redactando los hechos que suceden. Hay pocas referencias al ambiente y muchas a las reflexiones personales o al modo en que el protagonista asimila el mundo que lo rodea. La historia avanza hasta un final apoteósico que se sostiene y se justifica precisamente en toda la rutinaria exposición del principio de la novela. Es ese final el que da sentido a la historia, y está plagado de reflexiones sobre ciertas cuestiones, junto con frases que caen como una losa sobre los argumentos que se exponen.
                El tema de esta obra, pese a su corta extensión (para mí es de corta extensión todo lo que no supera las 200 páginas), es complejo y profundo. La forma de asimilar el mensaje que transmite dependerá de la experiencia del lector, pero se podría decir que trata sobre la justicia y también sobre la injusticia. Trata también de la religión y su papel en el mundo actual, de los sentimientos, de la información o la desinformación.
                La historia está plagada de preguntas abiertas, dejadas ahí por el autor sin responder, para que el propio lector saque sus conclusiones. El autor simplemente expone unos hechos y es el lector el que tiene encontrar su sentido.
                Los personajes son parte del decorado, salvo el protagonista, al que se irá conociendo a partir de su comportamiento. Es una historia interior, no hay grandes aventuras ni lugares exóticos. Sólo hay vivencias. Y sólo al final de la historia se podrá averiguar el porqué del título.
                El ritmo de la historia es ágil. No hay apenas pausas en el avance hasta el desenlace.   
                Tomando la novela como un conjunto, diré que es muy recomendable su lectura. Las conclusiones que saque cada lector pueden ser muy diferentes entre sí, pero creo que a nadie defraudará esta obra. Da que pensar. Otro punto a su favor es su poca extensión, con la que el autor nos demuestra que no es necesario derramar ríos de tinta para poner en debate algunas cuestiones importantes y controvertidas. Eso es algo que cualquier lector agradece, cuando no aparecen más hechos ni más descripciones que las estrictamente necesarias para causar el efecto que desea el autor. Y para eso hace falta ser buen escritor.
                Y por eso recibió el premio Nobel de Literatura.

3 comentarios:

  1. Pues yo debo ser "extranjero" porque esta novela me parece sobrevalorada y apenas me dice nada. Un lenguaje muy simple y diálogos cortos y para nada trabajados. Tampoco veo Filosofía en la novela salvo quizás al final cuando habla con el párroco.
    Con perdón, pero para mi es un libro vulgar.

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    1. A mí, sin embargo, los interrogantes que aparecen me dieron mucho que pensar, y por eso creo que merece la pena. Pero es mi opinión personal.

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  2. Acabo de terminar de leer la obra.
    Te deja un sabor amargo en la boca. El protagonista es un extranjero de la vida en si, le es indiferente todo. Le puede pasar un tren por arriba a su madre o su novia que al fin y al cabo lo va a asimilar y lo va a terminar aburriendo. Palabra que se repite mucho en todo el libro, aburrimiento. Todo lo que lo emociona o lo divierte es demasiado efímero, se aburre muy rápido. Le aburre la vida.
    Realismo puro, existencialismo. El trasfondo de la obra es el sin sentido de la vida. La vida que estas viviendo es la única que vas a vivir, vas a morir y después no va a pasar nada.
    A mi me da un poco de lastima...

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