En 1996
tuvo lugar una tragedia en el Everest. El periodista estadounidense Jon Krakauer estaba allí
en ese momento, recopilando información para un artículo sobre la explotación
comercial de la montaña. Superviviente de la tragedia, escribió un reportaje, y
tiempo después añadió algunas aclaraciones, que es lo que encontramos en esta
novela documental.
A lo
largo de sus 368 páginas, el autor expone en primera persona la crónica de una
expedición motivada tanto por su trabajo como por un reto personal pendiente.
El Everest, la cumbre más alta a la que puede aspirar cualquier alpinista,
había sido una tarea pendiente para el autor, apasionado del montañismo, hasta
que le surge la oportunidad de realizar una costosa expedición costeada por la
revista donde trabajaba.
Tal
como el autor expone, una de las preguntas cuya respuesta buscaba para su
trabajo es: ¿qué motiva a las personas que emprenden la dura tarea de ascender
a esa zona poniendo en riesgo su propia vida, viviendo en unas condiciones
climatológicas no aptas para la supervivencia, y todo ello tras haber sufrido
penurias durante varios meses, y haber gastado una considerable cantidad de
dinero, no apta para todos los bolsillos?. A ello hay que añadir la poca
preparación de algunos de los que deciden emprender dicha aventura, que no son
alpinistas profesionales, lo cual queda muy bien reflejado en esta historia.
Los
personajes de la historia son el propio autor, los guías de las expediciones
que coincidieron en esas fechas, los propios clientes de esos guías y los
sherpas que los acompañaban. Diversos grupos que se ven entremezclados en esta
aventura (o desventura, que sería más apropiado). Todos ellos son personajes
reales, cuyos testimonios también fueron recopilados por el autor, que llevó a
cabo una ardua tarea de reconstrucción de los hechos que él mismo había vivido,
contrastando su punto de vista con el de los demás supervivientes.
El
estilo de la narración es tal que mantiene enganchado al lector en todo
momento. No sólo explica cómo se lleva a cabo una compleja expedición de este
tipo, sino que lo hace explicando los detalles técnicos de tal forma que
cualquier persona ajena al montañismo pueda comprender qué se está haciendo y
qué es lo que está en juego. La continua tensión de la historia no necesita de
grandes artificios literarios para convertir la historia en emocionante, porque
ya lo es de por sí. Y la forma en que Jon Krakauer lo relata es magistral.
El
hecho de que no estemos ante una novela estrictamente hablando, sino ante un
reportaje, hace que haya dos lecturas distintas de esta historia que el lector
encontrará a la vez: por la parte novelesca, hay una historia de aventuras,
ambientada en una inhóspita zona montañosa donde un grupo de personas intenta
alcanzar la cumbre más alta, tarea que a priori parece más allá de lo que el
grupo puede soportar físicamente. La otra lectura es un ejemplo de una
expedición de este tipo en la realidad, día a día. Todo ello teniendo en cuenta
que tanto los personajes como el ambiente en que se mueven es real. Así, el
Everest queda reflejado como lo que realmente es: una meta ambiciosa, no apta
para cualquiera.
El tema
principal de esta obra es difícil de destacar, pero me quedaría con la ambición
humana, que es tal vez la respuesta que autor buscaba y que, años después,
siguió intentando explicar.
Aunque
pueda quedar mal decirlo, he disfrutado leyendo esta novela. No es que haya
disfrutado de los hechos que se narran, sino de la otra lectura, lo que se
aprende. Hay novelas que son como un viaje, como un agradable paseo. En otras
se conocen personajes que dejan huella, que disfrutamos conociéndolos. En esta
novela, para mí, es de las que se aprenden cosas. Muchas cosas. Como aficionado
al montañismo, he aprendido por la experiencia ajena qué es exactamente vivir a
esas alturas inhóspitas donde el cuerpo humano no funciona como debería. Cuáles
son los riesgos, y cuáles las recompensas, si las hay. Qué puede pasar, qué se
puede esperar. Y, sobre todo, que sirva de advertencia para todos los que
puedan aprender algo de errores ajenos.
Novela
muy recomendable, sin lugar a dudas. Imprescindible para los aficionados a la
montaña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario